"Para que todos juntos, trabajadores, estudiantes, hombres de todas las ideologías, de todas las religiones, con nuestras diferencias lógicas, sepamos unirnos para construir una sociedad más justa, donde el hombre no sea lobo del hombre, sino su compañero y su hermano"

AGUSTÍN TOSCO

domingo, 14 de noviembre de 2010

la actividad en el barrio

EN EL BARRIO,

Hace alrededor de diez meses un grupo de vecinos de los barrios periféricos de la ciudad, se animaron a juntarse para demandar soluciones frente a problemas que los aquejaban. Entre las primeras solicitudes estuvo el arreglo de calles, iluminación en las esquinas, desbordes de cloacas, agua potable para las casas que aun no contaban con ese servicio, etc.

Allí se comenzó con una práctica que hacía tiempo no se daba, se convocaban los vecinos y se ponían a consideración los temas a tratar. En este ámbito se llego a reunir no menos de 20 vecinos, lo cual provocó un entusiasmo en los demás.

El producto de estos encuentros fueron: presentación de nota al intendente municipal acompañada de aprox. 200 firmas juntadas por los vecinos, y como consecuencia de esta presentación una reunión en el despacho del propio intendente con la participación activa de al menos 20 vecinos en representación del barrio. Allí se les plantearon los problemas a los funcionarios de las aéreas respectivas comprometiéndose estos a visitar el lugar para tener una visión mas acabada de la situación, ya que dicho por ellos mismos, en lo que iba de sus funciones nunca habían recorrido la zona.

Con posterioridad a esto y gracias a la constancia de los que allí habitan, los encuentros con funcionarios en el mismo barrio se siguieron produciendo. Se los convocaba y tenían que concurrir y así surgieron otras reivindicaciones y demandas que algunas se fueron solucionando y otras continúan hasta hoy, como por ejemplo el desagote periódico de los pozos ciegos, lo que trae aparejado graves afecciones alérgicas constatadas por los funcionarios del área Salud, Medio Ambiente y por la Asistente Social del barrio.

Con el transcurso de los meses se produjeron algunas vicisitudes que provocaron problemas que fueron superados gracias a la fortaleza del grupo que no se dejó quebrantar.

Luego de esto se quedó más fortalecido y ya no solo se peleaba por las reivindicaciones del barrio sino que trascendió a otros aspectos de la vida de las familias.

Se construyó un horno de barro que se pretendía utilizar para hacer pan y demás, con el propósito del consumo personal y si era posible la venta allí en la zona.

Entre otras cosas surgió la idea de la compra colectiva o cooperativa de mercadería. A esto se llego luego de un análisis de la situación en la que se veía un aumento de los precios y sumado a los magros recursos bajados desde el municipio, en lo que se da por llamar “Comiendo en familia”, programa por el cual se le otorga a cada familia $40 por hijo por mes. Con esta iniciativa se busca apalear en algún punto la situación de desprotección en materia alimenticia que sufren nuestros vecinos producto, entre otras cosas, de las flojas políticas municipales al respecto.

La construcción en el barrio continúa en pleno avance y seguiremos contando las experiencias allí vividas.

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JUNTO A LOS VECINOS.

Uno de los frentes que encara nuestra agrupación es el barrial. El mismo se divide en zonas de trabajo en los distintos barrios. Las tareas que hemos realizado hasta el momento con los cumpas son varias y algunas de ellas han sido dirigidas al asentamiento sur ubicado detrás del barrio S. Cayetano.

Los fines de semana estamos acompañando a todos los chicos del barrio con actividades recreativas como, hacer muñequitos de arcilla, barriletes, futbol para nenes, dibujar y pintar, etc. Allí ellos se distraen, se entretienen y porqué no, empiezan a tomarte cariño, por los momentos que quizá, por distintos motivo, no pueden brindarle sus familias.

Luego de ir varias semanas, cuando el invierno empezaba a doler, veíamos a los pibes, y algún que otro viejito sin calzado o sin el abrigo necesario para soportar esas oleadas de frío que se avecinaban, es por ello que decidimos arrancar con la Campaña de la Frazada. Nos empezamos a movilizar, y a propagandear nuestra idea. Dada la casualidad, nos encontramos en unas de las casitas del asentamiento a la notera de radio máxima, que entrevistaba a una familia por el tema de viviendas, y entre cruces de palabras nos entrevista, aprovechando el momento comentamos nuestra idea pidiendo colaboración a aquellas personas que les sobre o que ya no usen una frazada, y/o ropa para cualquier edad y sexo.

Al cabo de 3 días empezó a caer la gente con bolsadas de ropa, frazadas, almohadas, bufandas, etc., y tanto de parte de los vecinos como nuestra, les decimos gracias! Porque todavía hay gente solidaria en Gualeguaychú, que se preocupa por el que tiene al lado.

Como logros colectivos con los vecinos resaltamos la audiencia con el intendente conseguida desde y por los mismos vecinos del asentamiento para buscar respuestas concretas ante la problemática visible.

De todos modos entendemos que con esto ultimo no basta , que no es la solución a lo mediato, la solución a la raíz del problema en cuestión, que no alcanza con tender la mano, porque los marginados con una frazada mas o una menos no dejaran de ser excluidos del perímetro social o de la sociedad establecida bajo regímenes de pensamiento individualista, del tan famoso ¡SALVESE QUIEN PUEDA! propio del neoliberalismo.

Por tanto comprendemos que esta es una etapa necesaria de concientización pero el objetivo como tal esta fijado en un horizonte todavía mucho mas lejano, y no descansaremos hasta alcanzarlo, para que no halla mas un pibe con hambre, ni un hombre sin trabajo porque lo único que debemos hacer es que valgan nuestros derechos!

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